Economistas tienen posiciones contrarias sobre que el Banco de la Nación sea un ente regulador.
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Cercado. Presidente de la República, Pedro Castillo Terrones, propuso que el Banco de la Nación sea un ente regulador de los intereses exorbitantes de las entidades financieras y proporcione al ciudadano todos los servicios bancarios disponibles, con tasas de utilidad razonables, “sin usura”, dijo. Pero, ¿está preparada la entidad estatal para ser la abanderada de la economía financiera del pueblo? Dos economistas sustentan sus puntos de vista.
VIABLE. El decano del Colegio de Economistas de Arequipa, Oswaldo Zevallos Gonzales, señaló que la propuesta presidencial es viable y lo que se tiene que hacer es dotar a la institución de buena tecnología y recursos humanos para implementar lo que se propone.
“Cuando hablamos de tecnología no solamente hablamos de maquinaria y equipo, sino también hablamos de capacidades para administrar adecuadamente una entidad como es el Banco de la Nación, es de carácter integral”, dijo.
Sin embargo, asegura que no es posible que se haga en un corto periodo. Más bien será a mediano plazo, quizás para el segundo semestre de 2022.
INVIABLE. Por su parte, el exdecano del Colegio de Economistas de Arequipa, César Bravo Febres, sostiene que la propuesta es imposible y pone de ejemplo el Banco Agrario, Industrial y de Materiales, entidades que quebraron por otorgar préstamos que no vieron retorno.
“Sí hay que regular los intereses. Pero, de otras formas con la banca privada para evitar que haya cobros excesivos de intereses. Sin embargo, el Banco de la Nación no tiene el personal idóneo para hacerlo”, dijo.
Y agregó que el país no está en condiciones de desembolsar dinero para las familias, como lo anunció el presidente, sino más bien debe resguardar su economía hasta que salga de la crisis. “La experiencia manda que todas las entidades financieras del Estado quebraron”, puntualizó.