Francisco Javier de Luna Pizarro

 Este sacerdote y abogado es el primer presidente del Congreso constituyente del Perú.





Francisco Javier de Luna Pizarro y Pacheco es el sacerdote y abogado más importante de la política peruana desde el momento de la declaración de la Independencia del Perú.

Nació en Arequipa el 3 de diciembre de 1780. Hijo de Juan Bautista de Luna Pizarro y Cipriana Pacheco Arauz.

A los once años ingresó al Seminario Conciliar de San Jerónimo de su ciudad natal, cuyos estudios se desenvolvían entonces bajo la ilustre dirección del obispo Pedro José Chaves de la Rosa.

Viajó luego al Cusco, en cuya Universidad de San Antonio Abad, optó la Licenciatura en Leyes y Cánones y en Sagrada Teología.

Al regresar a Arequipa, se dedicó a la docencia enseñando Filosofía, Ética y Matemáticas.

Nuevamente se dirigió al Cusco a estudiar, donde se recibió de abogado ante la Real Audiencia del Cusco en 1801.

Hizo lo propio en la Real Audiencia de Lima en 1802. En 1819 fue nombrado rector del Colegio de Medicina de San Fernando, a petición de la junta de catedráticos.

Luego de la proclamación de la Independencia, integró la Junta de Purificación que recibió las informaciones de los curas acerca de sus servicios patrióticos. 

Fue asociado a la Orden del Sol e integró la Sociedad Patriótica, creada para discutir acerca del régimen de gobierno conveniente al Perú (10 de enero de 1822). 

Elegido diputado por Arequipa, presidió el primer Congreso Constituyente desde el 20 de septiembre al 20 de octubre de 1822 e integró la comisión de redacción de la nueva Carta Magna de 1823.

Francisco Javier de Luna Pizarro fue una de las mayores figuras intelectuales y políticas a principios de la República: denodadamente patriota, con gran firmeza de carácter, defendió con vigor las ideas liberales, y a pesar de su edad y sus enfermedades, no doblegó su honor, su dignidad, ni su conciencia, frente a las innumerables persecuciones de que fue objeto.

En 1846, tomó posesión como vigésimo arzobispo de Lima. Murió en Lima el 9 de febrero de 1855.