Eguren y Rimbaud
Dentro de la obra poética de Eguren, Motivos es un apartado singular. Este libro reúne 38 textos escritos en prosa de diversa composición genérica y sin un orden de agrupación predeterminado: ensayos, estampas literarias, poemas en prosa, relatos breves y aforismos. En tal sentido, el cultivo de la prosa no resulta extraño en poetas que han alcanzado un notable desarrollo en la expresión lírica. Con frecuencia, la escritura en prosa ha significado un medio de subsistencia para los poeta. Especialmente la prosa periodística, la narrativa de ficción (cuentos y novelas) y de no ficción (crónicas, diarios de viaje), la crítica literaria o artística y la escritura autobiográfica han sido los géneros más recurrentes en la prosa de los poetas. En el caso de Rimbaud en Illuminations y Baudelaire en Petits pöemes en prose, su escritura en prosa conserva un intenso aliento poético.
La intención evocativa es una cualidad importante en “Paisaje mínimo” de Eguren. Ricardo Silva-Santisteban reconoce el valor de la evocación en la prosa de Motivos “por su poética medular de encantamiento y lejanía”. Enrique Peña Barrenechea señaló que “Eguren es románico por su predilección evocativa”. El yo narrador evoca circunstancias de la infancia para explicar una idea fundamental que organiza este texto: la perspectiva minimalista de los niños posee una enorme capacidad de síntesis: “La metafísica de la miniatura es una síntesis, y ésta puede mantener virtualmente fuerzas grandes”. Se trata de un brevísimo relato cuyo forma y contenido apoyan la tesis del texto. Solo requiere ciertas líneas perfiladas para sintetizar la esencia de la idea-fuerza que anticipa desde el inicio: “La miniatura es el espejo de la infancia. Se diría que los niños son miniaturas”.
El minimalismo en la expresión textual es una cualidad que comparten la prosa poética de “Paisaje mínimo” e “Infancia”, igualmente extensiva a los libros donde están reunidos cada poema. Al respecto, Hugo Friedrich ha anotado el doble significado del vocablo “illuminations”: miniaturas e iluminaciones. Asimismo, sobre el denodado interés de Eguren sobre la infancia, lo lúdico y las miniaturas se ha reflexionado ampliamente.
Entre algunas características de las prosas de Illuminations, Hugo Friedrich destaca “el mirar hacia atrás y el mirar hacia adelante”. Agrega que “El dramatismo de estos poemas consiste en desmenuzar el mundo para que el desorden sea la epifanía sensual del misterio invisible”. Del mismo modo que Motivos, los textos de Illuminations no están organizados sobre la base de algún criterio preestablecido. Los títulos no guardan una relación estricta con el contenido, mientras que en las prosas de Eguren los títulos sí anticipan el tema. “Infancia” está compuesto por cinco apartados breves (I-V). El tono es duro, grotesco y oscuro; el ritmo es agitado en algunos pasajes y abunda en asociaciones disímiles. El tratamiento de la infancia no es para nada complaciente con el estereotipo del niño feliz: jóvenes madres y hermanas mayores con miradas llenas de peregrinajes, sultanas, princesas de andar y atuendo tiránicos, pequeñas extranjeras y personas dulcemente desdichadas”.
El bosque en la prosa de Eguren es un lugar propicio para la aventura y la fantasía; en cambio, en el texto de Rimbaud, el bosque es un espacio yerto donde advienen el abandono y la muerte. Finalmente, no nos encontramos ante un uso expositivo, razonado o plenamente narrativo de la prosa como en “Paisaje mínimo”; por el contrario, se emplea la prosa como recurso para amplificar la densidad de las metáforas que no se expresan mediante sintagmas nominales sino a través de oraciones y párrafos que mantienen la coherencia temática entre cada apartado.