Luchan contra delincuencia

Juntas vecinales piden reforzar su trabajo por el bien de la sociedad

Isabel Álvarez

redaccion@diario-viral.com

Cercado. Por más de dos décadas forma parte de la junta vecinal de IV Centenario, junto con la Policía Nacional del Perú y el municipio provincial recorrieron las calles para preservar el orden, pero ahora Orlando de la Flor, cree que el Gobierno debería reportenciar estas organizaciones y darles más armas legales e -incluso- puedan funcionar independientemente.
Actualmente, existe una ley, la 29701, que dispone beneficios a favor de los integrantes de las juntas vecinales, empero para De la Flor es letra muerta, falta una reglamentación. “Había un proyecto para cambiar la ley actual, que establecía un organigrama, en el que debía haber un coordinador que maneje los representantes zonales, debería revisarse”, señala.
Sostiene que las juntas vecinales deberían cumplir más funciones, podrían, por ejemplo, supervisar los servicios al ciudadano como salud, ir a los hospitales, o acudir al mismo Ministerio de Transportes (gerencia regional), donde advierte que la corrupción continúa y nadie hace nada para erradicarla.

CAMBIOS. De la Flor también señala que el trabajo de las juntas vecinales ya no es como hace muchos años, donde se realizaban rondas vecinales, vigilias en diferentes sectores, se recuperaban espacios públicos; depende mucho del comandante o comisario a cargo. Recuerda a un técnico Huamaní, quien mantenía activas a todas las juntas del Cercado.
Belén Ugarte, coordinadora de la junta vecinal del pasaje Véliz (cerca a San Lázaro), también advierte que la actividad disminuyó.
Hasta hace unos 2 años, recuerda, los capacitaban, patrullaban las calles junto con los efectivos, se reunían en la comisaría, acciones que permitieron que los vecinos vivan tranquilos y más seguros. Empero eso cambió, ahora ya no los llaman, al menos no como antes.
Los consumidores de drogas o alcohol volvieron a pulular por las calles, cuenta, a veces deben buscar otra ruta para llegar a sus casas; llaman a serenazgo pero no siempre los atienden.
Cuando se renieron con el alcalde Omar Candia para exponerle sus problemas, les prometieron solucionar el inconveniente, pero no hubo respuesta y no regresó.
Desde la Policía solo supieron que hubo cambios.
Ambos esperan que se retome la coordinación entre las autoridades y los vecinos, que están dispuestos a ayudar, empero consideran que es necesario un trabajo en conjunto.

CONFUSIÓN. Desde el mensaje presidencial de Pedro Castillo, no se aclaró el anuncio sobre expansión del sistema de las rondas en lugares donde no habían.
Para la coordinadora de la junta vecinal de la Urb. La Negrita, Milagros Delgado, no es una buena idea porque estas organizaciones pueden no tener la preparación adecuada, además para velar para la seguridad están serenazgo y la Policía. En su caso el contacto con los serenos es constante, la junta tiene 7 años y vieron cómo los serenos no solo atienden accidentes, sino también otro tipo de problemas, ahora solo pedirían implementar cámaras de seguridad en las zonas donde no hay.