Don Roque es un especialista en elaborar cuadros con la técnica de acuarelas, su pasión en pintar, lleva más de 30 años preparando obras de arte
Cercado. Roque Aliaga Flores deja un momento el pincel para mostrar y explicar sus cuadros al público que detuvo su paso en la feria de artistas realizado en la calle San Francisco (instalada hace unos días), también se da unos minutos para atendernos. Todas las pinturas significan mucho para él, una de ellas muestra a su abuelita, también pintó la casa del reconocido pintor arequipeño, Luis Palao. En su lista de obras de arte hay una pieza elaborada con café. Hizo paisajes de Tiabaya, Chilina, Socabaya, Mariano Melgar, además participa en concursos de pintura. Don Roque puede elaborar hermosos cuadros, si quiere apoyar su arte y comprar sus obras puede llamarlo al 947592674.
¿Desde hace cuánto tiempo se dedica al arte? Egresé de Carlos Baca Flor hace unos 30 años, me dedico más a la pintura con acuarela, soy especializado en la rama artística, también había la docencia. En su momento tuve que dejar el trabajo como pintor. Cuando uno sienta cabeza y es padre de familia, las cosas son diferentes. Ahora retomé el arte desde la pandemia.
¿No es muy rentable? Cuando pintas un cuadro te puedes demorar una semana o 15 días, pero nadie te paga por hacerlo y si no llegas a venderlo, la desesperación llega a la semana siguiente cuando uno tiene carga familiar.
¿A qué se dedicó? Hago servicios varios, además del arte que es lo que más me gusta, aunque a veces cuando me piden algún cuadro, dejo lo demás para hacerlo. Los otros trabajos son de mantenimiento, muebles. De joven aprendí como ayudante, en época escolar, mi tío es carpintero y lo iba a ayudar los sábados.
¿Qué le gusta pintar más? Los paisajes.
¿Cuándo se dio cuenta que el arte era su pasión? En la primaria había otro compañero que hacía dibujos en blanco y negro, me llamó la atención y empecé, pintaba en mis carátulas, después mi profesor nos enseñó a dibujar con cuadrícula, así que todos mis dibujos los hacía perfectos. En secundaria, tenía las mejores notas en arte.
¿Tuvo apoyo en casa, cuando decidió convertirse en un artista? El arte aún sigue sin importancia, pero es maravilloso porque desarrolla la creatividad, por ahí, falta educarnos más. No había alguien que me motive, solo de casualidad estudié arte.
¿Cómo llegó a la escuela de artes? Saliendo del colegio hice servicio militar, al salir postulé a la Unsa, pero no ingresé. Un día me crucé con la Escuela de Bellas Artes, me encontré con alguien que me dijo que me inscribiera.
¿Pudo vender sus cuadros? Es difícil, no se sabe en qué momento lo vas a vender. Ahora (durante una feria que se realizó en calle San Francisco) no me fue muy bien, pero si he vendido y gané público, ahora más personas me conocen.
¿El talento viene de familia? Me cuentan que a mi tatarabuelo le gustaba dibujar y a mi abuelo le gustaba la artesanía, crear cosas, supongo que el talento es nato. A pesar que lo dejé por un tiempo estoy ahí. Cuando algo te gusta, lo lograr.
¿Recuerda sus primeros cuadros? En el taller de carpintería solía dibujar rostros con carbón, era cuando estaba en la secundaria más o menos.
¿A alguno de sus hijos también le gusta el arte? Tienen el talento pero no les interesa. De repente sí, pero no con esta visión, están más digitalizados. A los jóvenes les gusta pintar otras cosas, los motivos no son tradicionales. He visto dibujos de películas, con acuarela, hay mucho emprendimiento, mucha creatividad.
¿Su especialidad? Pintura a acuarela, también en óleo, también hago pedidos de muebles con dibujos en las puertas, entre otros.