Sedapar debió recepcionar trabajos en junio del 2020, hubo varias suspensiones y ampliaciones de plazo
Roberth Orihuela Q.
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Socabaya. La obra de “Creación del laboratorio de aguas residuales y efluentes industriales” que construye la Empresa Prestadora de Servicios (EPS) Sedapar en la antigua planta de tratamiento de aguas servidas de Chilpina, en el distrito de Socabaya, y que debió ser entregada en junio del 2020, aún no es recepcionada. La Contraloría General de la República advierte que se podría afectar a los objetivos del proyecto. Además señala otras deficiencias durante el proceso constructivo.
PURAS AMPLIACIONES. El proyecto fue entregado el 24 de enero del 2020 a la empresa Mejesa SRL. Esta ganó el proceso de licitación por un valor de S/ 1’373.787 y un plazo de ejecución de 150 días calendario. Con esto la obra debió ser entregada el 22 de junio del 2020.
Debido a la pandemia del Covid-19 el proyecto fue suspendido el 16 de marzo del 2020. Recién en julio de ese año se volvió a reiniciar, estableciendo un nuevo plazo de término para el 20 de octubre. Luego de eso Sedapar aprobó 2 nuevas suspensiones debido a la puesta en cuarentena de trabajadores, y otras dos ampliaciones de plazo. Recién el 13 de febrero del 2021 la obra fue terminada por Mejesa SRL.
Entonces se convocó a la conformación del comité de recepción.
Este tenía como máximo plazo para realizar la verificación de la obra el 14 de marzo. Sin embargo, recién el 16 de marzo realizaron este proceso. El comité realizó 55 observaciones y le dio a la empresa 35 días más para subsanar.
Este plazo terminó el 21 de abril. Tres días después se aprobó la recepción de la obra. Pero ese mismo día se suspende el proceso debido a que uno de los miembros del comité de recepción dio positivo para Covid-19 y entró en cuarentena. Luego se hizo lo mismo porque el presidente del comité también se infectó.
El 27 de mayo pasado la Contraloría visitó la obra y se constató que la empresa constructora no levantó todas las observaciones realizadas por el comité. Esto a pesar de que el supervisor afirmó que ya estaba todo solucionado. Además se encontró que por esos motivos la obra no ha sido recepcionada todavía.
DEFICIENCIAS. La Contraloría encontró varios faltantes: mejorar el acabado de la pintura, mejorar el muro divisorio de las duchas, servicios higiénicos y vestuarios, deterioro en el lavamanos de la mesa de trabajo de la sala de lavado, tarrajeo de los servicios higiénicos en el segundo piso, sumidero para lluvias en la azotea y varias más.
Se advierte que la supervisora del proyecto no hizo estas observaciones y dio la conformidad técnica. Esto, señala la Contraloría, podría generar que la entidad recepcione una obra que no cumple con las especificaciones técnicas del expediente y no cumpla su finalidad.
