Hospital Honorio Delgado cumple 61 años de fundación

El nosocomio que atiende a pobladores del sur se transformó en un año para atender a pacientes covid, pero aún hay muchas necesidades que atender y sufren exceso de usuarios graves


Libertad Merma
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Era 1960 y nuestra ciudad se recuperaba de los estragos ocasionados por dos terremotos que obligaron a los pobladores a buscar nuevos lugares para vivir. En medio de esta realidad nació el hospital Honorio Delgado, el 18 de julio de 1960. Previamente tenía los nombres de centro asistencial y sanatorio n.° 2, se encargaba de las primeras atenciones por enfermedades del tórax y para aliviar la carga que recibía su hermano mayor, el hospital Goyeneche.

Los dos fuertes sismos dejaron graves daños estructurales en el centro asistencial. Mientras se culminaban las mejoras en el nosocomio se logró la aprobación por el presidente de ese entonces, Manuel Prado Ugarteche, para elevarlo a la categoría de hospital general. Recibía el nombre de Honorio Delgado en honor al reconocido sabio arequipeño que impulsó el avance de la psicología y en general de la salud mental. El hospital regional Honorio Delgado Espinoza recibe su 61° aniversario como un paciente que lucha diariamente por su vida. La pandemia le asestó golpe tras golpe, pero su organismo, conformado por trabajadores de todos los estamentos, resiste dando lo mejor de sí para seguir atendiendo a los arequipeños.

TRANSFORMACIÓN. El director del hospital, Richard Hernández Mayori, cuenta que en marzo de 2020 cuando se dispuso que sea hospital covid, hubo dudas y temores de todo el personal. “No estábamos preparados y conversamos con la parte asistencial y administrativa del hospital sobre las deficiencias y lo tomamos como un reto”.

En plena pandemia con cientos de contagiados y muertes por el nuevo coronavirus empezaron a mejorar una infraestructura que estaba deteriorada con 60 años a cuestas.

“Entre febrero y abril tuvimos que recuperar muy rápido a los 700 pacientes hospitalizados con diferentes males. Todos los pisos fueron desalojados para solo dar atención covid. Fue un golpe muy duro porque no conocíamos una pandemia. Nuestro personal se tuvo que reorganizar para dar de alta a esos 700 pacientes y acondicionar esos ambientes para los pacientes covid”, indicó Hernández. 

En mayo ya no había pacientes antiguos, todos eran nuevos y debían ser distribuidos en los primeros cinco pisos del hospital, mientras llegaban pacientes y no había lugares donde acomodarlos porque por dentro el nosocomio debía transformarse, por ese motivo en un momento había atención en los exteriores del hospital y largas filas en carpas.

“Las dificultades fueron excesivas, pero nosotros hemos quintuplicado el salvar vidas a varias que a pesar del esfuerzo las perdimos durante esta pandemia”, dijo. 

REFACCIONES. La covid es una enfermedad que te deja sin posibilidad de respirar, de las 700 camas de hospitalización hubo 30 puntos de oxígeno y necesitaban tener plantas que suministren este gas medicinal. 

“Necesitábamos cambiar las redes y debíamos arreglar las tuberías de agua y desagüe, al hacer las obras de solo refacción vimos que están destrozadas y teníamos que cambiar todo desde cero. Rompimos las paredes, el techo para arreglar las redes de servicios básicos. Teníamos la peor cara de la pandemia y recién en agosto teníamos una infraestructura adecuada y arreglamos otros pisos para evitar que los pacientes estén en el exterior. Invertimos 80 millones de soles”, contó.

Con lamento cuenta que las otras especialidades (ver infografía) fueron cerradas para volverse en hospital covid. Le pesó mucho transformar el Servicio de Pediatría en el área de emergencia covid. Sin embargo, aunque anular un vital servicio, en ese espacio se habilitaron 22 camas UCI, hay capacidad para 24 pero falta personal, además hay 13 camas Trauma Shock, actualmente son más de 440 pacientes que luchan por su vida.

MEJORAS. Antes de la pandemia, tenían 700 camas de hospitalización, con el nuevo coronavirus en nuestras vidas el hospital covid pasó a tener 408 camas con sus respectivos puntos de oxígeno. Hay menos camas por una razón que es el obligatorio distanciamiento social entre pacientes que deben separarse por dos metros para evitar contagios. Pero, habían 30 puntos de oxígeno ahora el cambio es enorme.

“En cirugía para varones y otra para mujeres habían 80 camas en cada ambiente, ahora hay 60 en cada uno con 45 puntos de oxígeno, parece menos, pero realmente hubo un importante avance. Lo que no se ve es que también eliminamos procesos burocráticos en el área administrativa para hacer compras, dar permisos, etc. Los documentos se demoran en tramitar tres meses ahora solo un mes”, explica. 

PERSONAL. Hernández cuenta que antes de la pandemia hicieron un estudio que arrojó que tenían déficit de personal 1100 trabajadores. Hasta febrero de 2020 eran 800 empleados formales. Este año el hospital Honorio Delgado cuenta con 2500 trabajadores, sobre todo son profesionales contratados por CAS Covid, es decir, el 60% del personal debe irse cuando se controle la pandemia.

Para pagar al personal, por mes invierten 350 mil soles. En el hospital hay alrededor de 240 médicos, 700 enfermeras, 400 técnicos en enfermería, vigilantes, cocineros, operarios de lavandería, administrativos, personal de limpieza, desinfección y otros importantes profesionales que permiten salvar a un hospital covid.

RECURSOS PROPIOS. Sin pandemia, el hospital covid atendía 1200 consultas diarias de diferentes especialidades, cobraban 12 soles por consulta externa. Al año significaba 9 millones de soles de recursos propios que dejó de generar el Honorio Delgado. En estos dos años de pandemia, dejaron de generar 18 millones de soles porque no hay atenciones médicas de otras especialidades.

“No tenemos recursos propios, pero el SIS por aseguramiento nos transfirió 20 millones de soles para comprar diferentes insumos, sobre todo de farmacia. El gran ingreso es de Programa Nacional de Inversiones en Salud (Pronis) para cubrir diferentes necesidades del hospital en equipamiento y refacción de áreas débiles”, indicó.

DONACIÓN. En medio de la desgracia de tener que hacer mucho con pocos recursos, mientras se ordenaba el apoyo gubernamental, las empresas privadas apoyaron al hospital dándoles las primeras dos plantas de producción de oxígeno que donaron Cerro Verde y empresa Yura.

Hubo un sinnúmero de empresarios, clubes deportivos y personas naturales que durante esta pandemia llevaban desde agua y refrigerios para pacientes y personal de salud. “Hubo tanto apoyo que, en medio del cansancio y desesperación, nos daban esperanza”, contó.

SIN PANDEMIA. Si mañana terminan los contagios de la covid y el hospital atiende pacientes con otras enfermedades, tendrán un nosocomio con mejor infraestructura y equipos, pero con 800 trabajadores que atenderán a 1200 pacientes diarios. 

“Falta equipamiento que esperemos llegue, el personal es una incógnita, casi todos se irán, vamos a pedir al Gobierno que asigne recursos permanentes para que se quede el personal nuevo en nuestro hospital”, indicó.

LO PEOR DE LA COVID. En el 2020, junio y julio fueron los meses más duros que atendieron en el Honorio Delgado con 90 a 100 atenciones diarias en sus momentos más críticos. En el 2021 los meses más críticos fueron mayo y junio y atendieron 120 a más pacientes por día.

“No se notó el duro golpe de la segunda ola, porque estuvimos un poco mejor equipados con personal e instrumentos como las camas. Por eso seguimos proyectando soluciones porque puede venir una tercera ola porque la gente no se vacuna”, indicó.

SENSACIÓN. En este año y medio de casi pandemia son 14 profesionales del Honorio Delgado que fallecieron, Hernández indica que en su memoria hacen mayores esfuerzos para salvar a los pacientes.