Baltazar Zeballos Sánchez: "El hombre de la fiesta"

Don Baltazar es un orgulloso padre que vio crecer su negocio familiar junto a su esposa, logrando diferenciar a Buffet Gasparín piñatería de su competencia




PERFIL. Baltazar Zeballos Sánchez es un padre de familia de 64 años, natural de la ciudad de Arequipa. En el año 1987 su esposa, la señora Francisca Amparo Llerena de Zeballos, más conocida como la señora Amparito, abrió una piñatería en la calle Deán Valdivia a la altura del parque Duhamel. En un inicio, por la zona solo existían cinco tiendas de este tipo. En la actualidad, este sector del Centro Histórico de la ciudad está abarrotada de piñaterías. Don Baltazar es padre de dos hijos, Leydi y Carlos. También es abuelo de dos nietos: Benjamín (9) y Gabriel (4).

En medio de un numeroso grupo de compradores, el señor Baltazar junto a su esposa Amparito y su hijo Carlos atienden con mucha alegría. Un joven periodista busca un espacio para entablar una conversación, pero al local no dejan de llegar fieles y nuevos clientes a la piñatería Gasparín. 

¿Cómo se encuentra señor Baltazar? Me encuentro contento, pero un poco rezagado por el tema de la pandemia que nos está afectando en estos días.

¿Cómo llegó a colocar su piñatería? Hace 32 años. Mi esposa, una persona emprendedora, decidió meterse en este tipo de negocio por las fiestas infantiles, para darle alegría a los niños que cumplen años, y la seguí.

¿Cómo conoció a su esposa? Nosotros nos conocimos de muy jóvenes. Nos casamos también jóvenes. Se llama la señora Amparito, es bien conocida en el ambiente de las piñaterías.

Cuándo inició en este rubro, ¿Cómo eran las piñaterías en sus inicios? La primera tienda que abrimos fue en el año 87, era pequeña, y empezamos con las piñatas de papel, con los materiales comprados de librería. Al inicio no había imprentas que hicieran el trabajo de ahora. Todo era manual. Pero con el paso de los años y nuestro esfuerzo, seguimos modernizando la tienda. Cuando abrimos con mi esposa la primera tienda, encontramos que solo había tres piñaterías en el parque Duhamel y dos en la calle Piérola. En ese entonces, era todo muy tradicional, no era como ahora.  

¿Cómo fue mantener una familia al mismo tiempo de trabajar en la piñatería? Los primeros 12 años de la piñatería Gasparín, mi esposa lo regentaba. Yo me encontraba trabajando fuera de Arequipa con una constructora. Luego llegué para reforzar a mi esposa y poder crecer nuestro negocio. Al llegar, decidimos cambiar la razón social como Buffet Gasparín Piñatería E.I.R.L.

¿Qué significa Buffet Gasparín Piñatería para Arequipa? Nosotros somos una empresa que nos dedicamos a la realización de eventos familiares, empresariales y patronales. Realizamos fiestas infantiles, matrimonios, quince años, bautizos y todo lo que un papá sueña para el ser querido de la casa. Cubrimos las comidas, bocaditos, cócteles, entre otros; todo eso para convertir una celebración en un momento feliz. 

¿Cómo percibieron la pandemia? ¿Qué significó para ustedes? Nosotros durante la pandemia nos retiramos totalmente. Hemos cerrado casi 9 meses para evitar los contagios y cuidar de mi esposa, de mis hijos y nietos. Entre las fechas de agosto y septiembre del año pasado, salimos a trabajar. El negocio actualmente no está al 100%, solo llegamos hasta un 25% o un 30% de lo que se estimaba en ventas mensuales.

Abordando el tema de la pandemia, pero ya en un entorno familiar ¿Cómo les afectó la enfermedad en casa? Gracias a Dios en mi hogar, por tener una buena cuarentena y por cuidarnos con un buen protocolo en casa y en la tienda, no hemos tenido ningún tipo de enfermo con esta enfermedad de la Covid-19. 

Por respetar la normativa, no se han visto afectados en casa entonces. Así es, hay que respetar las normas. En la calle y en la casa, y en el negocio se cumplen todos los protocolos para que así podamos estar bien.

Algún mensaje final que desee agregar. Mandarles un saludo especial a todos los papás por su día. Desde Buffet Gasparín les hago llegar un fuerte abrazo y un apretón de manos. Sabemos que ser padre es un momento muy difícil, pero hay que saberlo llevar en todos los momentos con amor y paciencia en la casa con la esposa y con los hijos. 

DETALLE. Gracias al estricto cumplimiento de las normas, en la familia de don Baltazar no hay afectados por la temible enfermedad de la Covid-19.