El 28 de mayo de 1969 ocurrió una catástrofe en el sector de Uchumayo, una fábrica de dinamita explotó matando a 25 personas.
Hace 52 años, el 28 de mayo de 1969, sucedió una terrible explosión en la fábrica Dinamitas del Sur S.A. (DINSUR), ubicada en Congata, distrito de Uchumayo, la empresa era próspera en aquel momento. La explosión fue comparada con un terremoto que se sintió desde Uchumayo hasta el Centro Histórico donde murieron 25 personas que trabajaban elaborando cartuchos y algunos vecinos de la zona. Se calificó ese hecho como un homicidio masivo por la falta de condiciones de seguridad y porque la fábrica no contaba con las autorizaciones respectivas.
El investigador de diferentes sucesos arequipeños, Rubén Cerdeña Ocola, contó que la empresa funcionaba unos diez años antes del accidente y daba empleo a las pocas familias que vivían en ese sector árido y lejano, quienes elaboraban los explosivos. Las mujeres se encargaban de preparar los cartuchos con papel y en la fábrica los llenaban con pólvora.
“La gran explosión que sacudió a Arequipa, como si fuera una erupción volcánica, marcaría las memorias de los pobladores de Congata, que en ese entonces pertenecía a Tiabaya y estaba a 12 kilómetros de la ciudad de Arequipa”, relata.
El acontencimiento fue devastador, por la destrucción del lugar y de las personas que estaban en la fábrica y alrededores. El hecho fue el más difundido de 1969, al punto que el diario ABC de España publicó el 30 de mayo su noticia bajo el título “Veinticuatro muertos en Arequipa (Perú) al estallar mil quinientas cajas de cartuchos”, mientras que la revista nacional Oiga escribía: “Congata peor que un terremoto”.
SUCESOS. Según cuenta el diario ABC, la explosión ocurrió a las 13:30 horas, ocasionó la muerte inmediata de 24 personas y otras 39 estaban heridas y cuatro quedaron en estado de coma. De esta cifra, murió uno más, los otros quedaron minusválidos.
Los trabajadores de Dinamitas del Sur S.A. estaban en plena jornada laboral, cuando una explosión de 1500 cajas de dinamita turbó todos los hogares arequipeños. En el momento del accidente, estaban trabajando 70 obreros. Una de las sobrevivientes, Hilda Vives, contó a los periodistas que días atrás ocurrió un amago de incendio que fue controlado a tiempo.
Asimismo, el médico forense de ese momento, calificó al hecho como un homicidio masivo por no brindar condiciones de seguridad a los empleados.
El hecho fue desgarrador porque la Policía, junto con los bomberos, encontró cadáveres mutilados a 300 metros del lugar donde estaba la fábrica.
Los arequipeños que recuerdan esa explosión, cuentan que estuvieron temerosos y se volcaron a las calles creyendo que era un terremoto, posando su mirada hacia la Panamericana Sur vieron un hilo de humo negro que se convertía en una sábana negra que ocultaba el cielo en señal de tragedia.
“Recuerdo que yo estaba en mi casa en esos momentos y no obstante, que está ubicada en la ciudad, escuché el gran estruendo y al salir a ver se podía divisar el enorme hongo de humo y tierra que se iba levantando hacia el cielo como los que se forman en una explosión nuclear. El escenario era terrible, había señal de muerte que se plasmaba en el cielo arequipeño”, comenta Rubén Cerdeña Ocola.
Han pasado 52 años de este siniestro, las causas nunca se llegaron a esclarecer a pesar que fue considerada una de las catástrofes más terribles del siglo XX, los muertos yacen en una fosa común en el cementerio del distrito de Uchumayo y se colocó una gran lápida en el sector con los nombres de las 25 personas que fallecieron en ese lugar.
RECUERDOS. El ciudadano Alonso Núñez contó que pudo llegar a Congata en menos de 10 minutos de la explosión, encontrando la destrucción de las casas del pueblo. “Me encontré con manos, pies, piernas desmembradas de los cuerpos, toqué un torso calcinado de una víctima, fue algo terrible que marcó mi vida por siempre”, recuerda.
También Yaneth Talavera narra que aquel día estaba en clases y cursaba el cuarto año de primaria. Estaba cerca a la Compañía de Bomberos 19 y el estruendo fue sentido por todos.
