La educación en tiempos de pandemia

Tamara J. Gabriel Cunza
tamigabrielcunza@gmail.com

La educación es un derecho humano básico, sumamente importante y clave para el desarrollo de los países. Cuando los niños y niñas no pueden asistir a su centro educativo, sabemos que el futuro es incierto. Sin embargo, aún asistiendo a la escuela, no es suficiente para garantizar que adquirirán las habilidades educativas que requiere la sociedad en el siglo XXI.

Este año, debido a la pandemia, la educación básica ha experimentado un cambio de 180 grados. A nivel nacional por primera vez, las clases se han dado de forma remota por televisión, radio e internet con el programa “Aprendo en Casa”. Esta nueva modalidad ha originado diversas oportunidades, sin embargo, existen problemas y desafíos que han afectado, en particular, a miles de niños y adolescentes que viven en zonas rurales que sufren los efectos de la brecha económica y educativa.

Según la afirmación de UNESCO en los últimos informes, el cierre de escuelas y otros espacios de aprendizaje han afectado al 94 % de la población estudiantil del mundo y hasta el 99 % en los países con menores recursos y acceso a la tecnología. Tras este cambio tan repentino en la educación tradicional, apremia poner en el foco el rediseño de la enseñanza presencial y la virtual, asimismo, evaluar el impacto de su implementación y la transformación tecnológica necesaria de los espacios de aprendizaje.

Consideremos que el Covid-19, nos está poniendo a una dura prueba. La actual crisis sanitaria nos da la oportunidad de repensar nuestros sistemas educativos y nuestras prioridades en el mundo del conocimiento y el aprendizaje. Se puede resolver estos problemas de forma diferente, en este caso, aprovechando las nuevas modalidades educativas que se debieron poner en práctica, pero ahora creando las condiciones para mejora de la educación.

Ante la educación online, es importante establecer un fortalecido plan de trabajo semanal dentro de un horario fijo.