El costo de la vivienda
En pleno debate sobre la elección del administrador del Estado para el periodo 2021-2026 nos enfrentamos a retos mucho más grandes que el solo dar una mirada a los planes de gobierno, nos exige mirar más allá del árbol de la demagogia.
Los programas de reactivación le han entregado dinero barato a propietarios y accionistas de empresas de diversos rubros, dinero con plazos de primer pago a un año, más un año de gracia, son 24 meses libres de obligación, dos años que podrían ser de reinversión de ese dinero entregado por el Estado, reinversión en otro rubro o simplemente vacaciones en las obligaciones crediticias.
A pesar de la pandemia el sector vivienda no ha tenido un impacto negativo duro, a raíz de algunas opciones de financiamiento, las tasas de interés de los bancos en créditos hipotecarios siguen siendo bajas y atractivas debido a la reducción que impulsó el Banco Central de Reserva.
Pero eso no es todo, diversas constructoras e inmobiliarias han flexibilizado y reducido los costos de la inicial de tal manera que los clientes de los bancos puedan acceder a un departamento.
Pero, ¿quiénes se afectan en esta realidad? Primero el sector alquiler, ahora los alquileres de propiedad a 1 o 2 años serán repensados, es preferible invertir en una vivienda que gastar dinero en un alquiler.
Quienes tienen una vivienda y construyen, ladrillo tras ladrillo, el sueño de la casa propia, costos como el del fierro o el ladrillo, pagados con el esfuerzo económico diario compiten con quienes tienen dinero subvencionado por los Reactiva.
“El debate sobre si estamos reflejando la inflación de forma adecuada surgirá cada vez más. Los precios de la vivienda empezarán a recibir mucha atención”, afirma Manoj Pradhan, coautor de un libro titulado The Great Demographic Reversal (La gran inversión demográfica), que predice un resurgimiento de la inflación mundial en los próximos años.
El nuevo gobernante heredará el efecto económico de la improvisación de los Reactiva, no solo por su mala distribución, sino por su efecto pernicioso en el mercado de dinero, no es lo mismo un vecino que invierte las pocas ganancias de su negocio en la ampliación de la vivienda para sus hijos, que el beneficiario del Reactiva que puede construir hoy y empezar a pagar en dos años.
Vecinos, nos encontramos en la faena del domingo, hasta la próxima semana.
