Cuatro proyectos mineros en el sur

Ministro Jaime Gálvez Delgado señala que forman parte de un grupo de siete minas que se empezarán a construir este año en el país con una inversión de US$ 3577 millones.
















Redacción: Jonathan Bárcena C.
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Arequipa. El Perú cuenta con una cartera de 46 proyectos de construcción de minas que representan una inversión total de US$ 56 158 millones, según informa el Ministerio de Energía y Minas (Minem), a través de la Dirección General de Promoción y Sostenibilidad Minera.

De esta relación, el ministro del Minem, Jaime Gálvez Delgado, anunció que las obras de siete proyectos se iniciarán en este año con una inversión de US$ 3577 millones. Cuatro de estas minas se encuentran en el sur del país.

“El inicio de la ejecución de los siete proyectos mineros previstos para este año contribuirá a la reactivación económica del Perú, la generación de empleos directos e indirectos, así como a la recuperación del PBI. Tenemos que asegurar todas las obras y eventuales operaciones se realicen con eficiencia y sin descuidar el aspecto sanitario”, señaló el ministro en una entrevista para la revista Rumbo Minero.

Estos proyectos son: Ampliación Shouxin, ubicada en Ica, Chalcobamba Fase I (proyecto de reposición de Las Bambas), que se encuentra en Apurímac, Pampacancha (proyecto de reposición de Constancia), en Cusco, Corani en Puno, Yanacocha Sulfuros en Cajamarca, Optimización Inmaculada en Ayacucho y San Gabriel en Moquegua. 

Todos estos proyectos estaban previstos para el año anterior. Sin embargo, el inicio de la pandemia retrasó su construcción para este 2021. Aquí la descripción de los cuatro sureños.

CORANI. El proyecto argentífero (explotación de plata) Corani demanda una inversión de global de US$ 579 millones y está ubicado entre los 4800 y 5200 metros sobre el nivel del mar en el distrito de Corani, provincia de Carabaya, región Puno.

De propiedad de la empresa Bear Creek Mining S.A.C., Corani es un yacimiento a tajo abierto de tipo epitermal de sulfuración de baja a intermedia con plata (Ag), plomo (Pb) y zinc (Zn).

El proyecto cuenta con un Estudio de Impacto Ambiental detallado (EIA-d) para actividades de explotación, aprobado mediante R.D. N° 355-2013-MEM/AAM el 20 de septiembre del 2013 y en septiembre de 2018, Bear Creek Mining puso en conocimiento al Minem el inicio del periodo de obras tempranas.  

Corani contiene más de 225 millones de onzas de plata, 2.7 mil millones de libras de plomo y 1.8 mil millones de libras de zinc. Tiene una vida útil de 15 años y una capacidad de producción de 22 500 toneladas por día. 

Se prevé su construcción para este año y el comienzo de operaciones para el 2024. Solo en su etapa constructiva permitirá generar 1500 puestos de trabajo y en su faceta operativa otros 440.

La producción anual de este proyecto se estima que llegue a las 110 000 toneladas métricas finas (TMF) de plomo y plata y 80 000 TMF de zinc y plata.

Según el Minem, Bear Creek Mining obtuvo un financiamiento de US$ 30 millones y está tratando de colocar otros US$ 70 millones. Una vez logrado ello, podrán conseguir el préstamo bancario necesario para construir la mina. 

SAN GABRIEL. La compañía de Minas Buenaventura S.A.A. de capitales peruanos es la dueña del proyecto San Gabriel que demanda una inversión de US$ 422 millones. Su fase de construcción está prevista para este año y el inicio de sus operaciones para el 2023. 

En la etapa de construcción permitirá la creación de 2000 puestos de trabajo y en su etapa operativa otros 800.

San Gabriel está ubicado en Moquegua, entre los 4450 y 5000 m.s.n.m. en la provincia de Sánchez Cerro, distrito de Ichuña. Es un yacimiento de tipo epitermal de sulfuración intermedia con contenido metálico de oro (Au), cobre (Cu) y plata (Ag).

Tiene una vida útil de 10 años con una capacidad anual de 120 000 a 150 000 onzas finas de oro, mientras que su capacidad de explotación diaria es de 3000 toneladas. 

El proyecto cuenta con el Estudio de Impacto Ambiental detallado (EIA-d) para actividades de explotación, aprobado mediante R.D. N° 099- 2017-MEM/DGAAM el 31 de marzo del 2017. Ese mismo año, el 02 de octubre, Buenaventura presentó la solicitud para la Autorización de Inicio de Actividades de Explotación (Plan de Minado). 

Actualmente, según el ministro Gálvez Delgado, el proyecto se encuentra en proceso de consulta previa que está suspendido temporalmente. 

CHALCOBAMBA. Minera Las Bambas S.A.C. es propietaria de Chalcobamba Fase I, ubicado entre las cuencas de los ríos Vilcabamba y Santo Tomás, a una altitud entre los 3685 y 4660 m.s.n.m. en las provincias de Cotabambas y Grau de la región Apurímac.

Su inversión alcanza los US$ 130 millones y se estima que para el próximo año inicie sus operaciones. La mina a tajo abierto tiene una vida útil de ocho años. 

El proyecto se encuentra en fase de consulta previa. En la unidad minera Las Bambas actualmente se realizan actividades de explotación del yacimiento Ferrobamba y posteriormente se realizarán las actividades de extracción de minerales de los yacimientos Chalcobamba y Sulfobamba, con el fin de mantener los niveles de producción. 

Para desarrollar la explotación del tajo Chalcobamba se ha previsto que se efectuará en dos etapas. Para esta primera etapa, se considera la explotación del sector sur y central del tajo Chalcobamba.

El yacimiento tipo skarn de cobre (Cu) tendrá una capacidad estimada de 145 000 toneladas por día.

PAMPACANCHA. En Cusco, en la provincia de Chumbivilcas, Hudbay Peru S.A.C., de capitales canadienses, invertirá US$ 70 millones para su yacimiento a tajo abierto de cobre (Cu) Pampacancha. La etapa de construcción empieza este año y al próximo entra en operaciones. Se estima 150 puestos de trabajo en la primera etapa.

El tajo Pampacancha se ubica dentro de la unidad minera Constancia. Actualmente se encuentra en fase de consulta previa, mediante la cual se busca llegar a un acuerdo con las comunidades cercanas.

Hace pocas semanas, el propio ministro informó que el proceso de consulta previa entre el gobierno peruano y la comunidad de Chilloroya culminó con éxito, lo que dio como resultado que Hudbay tenga el permiso final para el desarrollo y operación del depósito cuprífero.

El proyecto cuenta con la segunda modificación del Estudio de Impacto Ambiental detallado (2da MEIA-d) aprobado mediante R.D. Nº 168- 2015-MEM/DGAAM el 17 de abril de 2015.

Su vida útil se proyecta para cinco años con una producción anual de 59 000 TMF de cobre.

MÁS PROYECTOS. Jaime Gálvez detalló que otro de los proyectos importantes es Yanacocha Sulfuros, ubicado en Cajamarca, el cual demanda una inversión de US$ 2100 millones. Se estima que inicie operaciones en el 2024.

Asimismo, se encuentra Ampliación Shouxin que demanda una inversión de US$ 140 millones para un yacimiento de fierro ubicado en Ica y la Optimización Inmaculada US$ 136 millones para una mina aurífera en Ayacucho.

“Proyectos como Optimización Inmaculada y Ampliación Shouxin constituyen oportunidades de crecimiento y nuevos empleos en esas regiones. Estimamos que la inversión minera total en el 2021 sea de US$ 5200 millones, equivalente al 2.4% del PBI”, señaló el ministro.

Gálvez Delgado también se refirió a Mina Justa. Según detalló, el proyecto cuprífero comprende una inversión aproximada de US$ 1600 millones, la generación de hasta 3000 puestos de trabajo directos en la etapa de construcción y una futura contribución al incremento de la producción nacional de cobre. 

“Con la futura puesta en operación de Mina Justa, Quellaveco y Ampliación Toromocho, para el 2025 llegaríamos a producir más de 3 millones de toneladas métricas de cobre al año”, dijo. 

Cabe precisar que Mina Justa será la segunda mina en el país en operar con agua de mar, sin devolver residuo alguno al océano ni afectar las fuentes hídricas fluviales de la región Ica. Su puesta en marcha debe concretarse en abril de este año brindando, en una primera etapa, ingresos al fisco por US$ 1000 millones.

PERÚ MINERO. El desarrollo de los proyectos antes mencionados deja en claro que, en el Perú, la minería ha sido la principal historia de éxito de las últimas décadas. 

Es la explotación minera la que al 2021 alcanzó dimensiones significativas como proporción de la producción nacional e impulsó el desarrollo de otras industrias relacionadas. A diferencia de casi cualquier otro sector productivo, en este campo extractivo, el Perú está entre los primeros del mundo.

En ese sentido, con el país en problemas por el brote de la pandemia del coronavirus, fue la minería la que asumió un rol principal en la recuperación económica por diversos factores, entre ellos sus buenos precios, demanda externa, capacidad de establecer protocolos sanitarios adecuados y otros. 

Según un diagnóstico del Instituto Peruano de Economía (IPE), que recoge un informe del Servicio Geológico de los Estados Unidos, se dice que el Perú es un país líder en la actividad minera a nivel internacional. 

En el 2019, el país destacó por ser el segundo mayor productor de cobre, plata y zinc en el mundo. Asimismo, en Latinoamérica, se ubicó como el primer productor de oro, zinc, plomo y estaño en el mismo año. 

El documento también detalla que las amplias reservas mineras, son otro factor para que el Perú sea considerado como uno de los países que aún tiene mucho por explotar. Por ejemplo, la nación posee las mayores reservas de plata en el mundo y, junto con Australia, las segundas mayores reservas de cobre. 

DE MUNDO. Según el ministro, Jaime Gálvez Delgado, la expansión reciente de la inversión minera es una pieza clave para la participación del Perú en la producción mundial. 

“Esta (inversión minera) se ha incrementado de un promedio anual de US$ 1000 millones entre el 2000 y 2009 a casi US$ 6000 millones en promedio en la última década, con un máximo de US$ 8864 millones alcanzado en el 2013”, detalló el ministro. 

En ese sentido, la inversión mostró una tasa de crecimiento promedio anual de 7.1% entre el 2010 y el 2019.

ETAPAS. La inversión minera pasó por tres diferentes etapas en los últimos 10 años. Hasta el 2013, se incrementó de forma sostenida, a una velocidad de 35% promedio anual, explicada por la construcción de grandes proyectos mineros como Las Bambas, Cerro Verde, Antapaccay y Toromocho. 

La finalización de estos proyectos llevó al país a una segunda etapa, caracterizada por una caída de la inversión promedio anual de 34% entre el 2014 y 2016. Mientras que la tercera etapa, la inversión se recuperó con la construcción de grandes proyectos como la Ampliación Toquepala, Quellaveco, entre otros. En esta última etapa, la inversión minera acumuló once trimestres consecutivos de crecimiento hasta el cuarto trimestre del 2019. 

PANDEMIA. El 2020, quizá fue uno de los años peor afectados para la minería en el país. Inició con una contracción interanual de la inversión minera, de 9% en enero y de 13% en febrero, debido a las menores inversiones en todos los rubros a excepción de plantas de beneficio.

La llegada de la pandemia y la paralización de las actividades mineras hasta mediados de mayo, agudizaron esta caída. 

Entre enero y noviembre de 2020, la inversión minera ascendió a US$ 3667 millones y acumuló una caída de 31% respecto al mismo periodo de 2019. Esto debido, principalmente, a la menor inversión en desarrollo y preparación (-69%) que contribuyó con 13.6 puntos porcentuales de la caída acumulada. 

En febrero, el Fraser Institute publicó los resultados de su Encuesta Anual a Compañías Mineras, en la que se encontró que el país había retrocedido 10 posiciones (del puesto 14 al 24) en el ranking mundial de atractivo para la inversión en minería entre el 2018 y el 2019. Este retroceso significó estar por debajo de Chile y la provincia de San Juan en Argentina, solo comparado con América Latina.

A los resultados del Fraser Institute les siguió el inicio del estado de emergencia en marzo de 2020. Las medidas implementadas por el Estado en ese contexto llevaron a que las empresas mineras reduzcan su actividad solamente a lo que se denominó “operaciones críticas”, según lo permitido por el Minem. 

Sin embargo, desde mayo, con el inicio de la Fase I de reactivación económica, la minería volvió a la carga y empezó a recuperarse. No obstante, la recuperación fue más lenta de lo esperado, por el tiempo de demora en la adecuación y aprobación de protocolos sanitarios de las empresas mineras.

En ese sentido, la reanudación productiva recién se dio efectivamente en el mes de junio. Con ello, el PBI minero pasó de caer 49.7% de manera interanual en mayo a disminuir 13.2% en junio.

Para este año 2021, el Banco Central de Reserva del Perú, proyecta un rebrote de la inversión minera de 29%. Ello responde a la amplia cartera de construcción de proyectos mineros, que ya hemos detallado al inicio (ver infografía).

Detalle. Instituto Peruano de Economía y Servicio Geológico de Estados Unidos colocan al Perú como uno de los países más prósperos en inversión y explotación minera. Mina Justa proyecto cuprífero con una inversión de US$ 1,600 millones. Generará hasta 3000 puestos de trabajo directos en etapa de construcción. año en que la productividad minera cayó en paralización a causa de la pandemia. Aun así, sacó adelante al país.