Piden apoyo de autoridades y empresas para dar alimentación en esta pandemia a abuelitos y madres solteras
A una combi roja hay que subir y después de viajar, bajar en su terminal y subir dos cuadras para llegar.
A la distancia miraba un cuarto de bloquetas, mientras me acercaba, algunos comensales se lavaban las manos como parte de los protocolos a cumplir en tiempos de pandemia. En el interior, un grupo de señoras batallando con la cocina y otras damas haciendo labores de reparto de comida a las casas de abuelitos en estado de vulnerabilidad.
CREACIÓN. La olla común Divino Niño Jesús de la Asociación Los Rosales del distrito de Chiguata se creó en marzo 2020 a raíz del estado de emergencia por el coronavirus y ante la necesidad que había de apoyar a los abuelitos, madres solteras y niños de este sector que fueron golpeados económicamente por la pandemia.
La presidenta Julia López Quispe contó que al principio del cofinamiento iban al comedor popular del sector, pero de la noche a la mañana la administradora del local no quiso dar víveres, ni arroz, ni nada.
No les quedó otra cosa que retirarse junto a sus compañeras para formar la olla común. Todas ellas son amas de casa con un gran corazón.
Lamentablemente la Municipalidad Distrital de Chiguata no les brindó ningún tipo de apoyo. Ni un kilo de arroz, ni una botella de aceite y lo que más le indigna a la señora Julia, es que la autoridad edil ni siquiera se haya aproximado a su olla común durante la pandemia.
Les faltaba agua para cocinar, pero por obra de Dios, como manifiesta la presidenta de la olla común, un vecino de la zona A les instaló una conexión con el líquido elemento que les ayuda bastante, porque las zonas B y C de la Asociación Los Rosales no cuentan con agua.
PIDEN APOYO. Julia López Quispe de la olla común Divino Niño Jesús de la Asociación Los Rosales de Chiguata pide apoyo a las autoridades y empresas para seguir con la misión encomendada.
Piden un local apropiado para dar atención a los vecinos necesitados y golpeados por esta pandemia, porque sus aspiraciones son convertirse en un comedor más adelante.
Contó que el gobernador entregó ayuda a los comedores hace unos días, pero a las ollas comunes no. Eso entristeció a la señora Julia.