Cacerolazos solidarios


Cacerolazos solidarios

Mildred Arriaga Velarde
mildredarriagavelarde@gmail.com

Recuperados de la decepción por los hechos registrados recientemente en nuestro país, lamentando la muerte del “médico del pueblo” Hipólito Chaiña, iniciamos un nuevo día agradeciendo la oportunidad de tenerlo, nos aferramos a la esperanza y confiamos que pronto terminará esta crisis sanitaria y económica provocada por la pandemia.

En esa perspectiva, admiramos el valioso trabajo del equipo periodístico de Viral que registra y cuenta la historia de todas esas personas que, sin tintes políticos y puro corazón, sacian el hambre de sus vecinos y familiares, organizando su tiempo, cooperando con tareas y responsabilidades, uniendo esfuerzos para preparar el alimento diario en las ollas de esperanza que hacen posible que cientos de pobladores sobrevivan en estos tiempos de Covid. 

Cacerolazo según la Real Academia Española (RAE) “es la protesta colectiva en la que se hace ruido con cacerolas”, las que se golpean fuertemente para hacer sentir disconformidad por falta de alimentos, sin embargo, en esta oportunidad muchas mujeres y varones de todas las edades, alzaron sus ollas, sartenes y demás utensilios de cocina, lo hicieron en silencio, sin arengas, pasaron de la protesta a la atención de su adversidad, alzaron los cacerolazos solidarios. 

Son iniciativas ciudadanas que sobreviven con alimentos donados, o cobros mínimos que no son suficientes para atender el hambre de los grupos golpeados por la desigualdad y pobreza, con un listado de comensales que se incrementa diariamente.

Los alcaldes distritales deberían acompañar y organizar estas redes comunitarias, haciendo las modificaciones presupuestales necesarias que les permitan atender de manera excepcional a este grupo de personas, el portal de transparencia del MEF revela que las municipalidades distritales tienen presupuesto en la partida del Programa del Vaso de Leche, que bien podría ampliar el registro de beneficiarios y atender a la población de niños.

Finalmente, Omar Candia, alcalde provincial, en la partida Programas de Complementación Alimentaria cuenta con más de 2 millones 98 mil soles, ha gastado 21 mil 183 soles, en pago de personal, y para comprar alimentos para programas sociales tiene un presupuesto de 1 millón 790 mil soles, no ha gastado ni un sol. El gobernador regional entregó recientemente alimentos y utensilios de cocina a los comedores populares formalmente constituidos, y no alcanzó a estas iniciativas. Que estos ejemplos de lucha y resistencia se fortalezcan y sigan siendo portadores de esperanza y solidaridad.