Los niños y jóvenes de la ONG Autismo AQP tienen sensibilidad auditiva muy delicada y piden tener unas fiestas sin estruendos
Utilizar la pirotecnia en las fiestas de Navidad y Año Nuevo puede ser divertido y una costumbre que viene de nuestros ancestros; sin embargo, hay niños y jóvenes que tienen el trastorno espectro autismo y sufren con el ruido estruendoso de los fuegos artificiales.
Diario Viral conversó ayer con Rosa Vásquez Contreras, presidenta de la ONG Autismo AQP, quien contó el daño que les causa el sonido de la pirotecnia, sobre todo en estas fiestas de fin de año.
VISUALES. “Los niños con autismo son bien visuales, no saben cómo les alegra; pero la sensibilidad auditiva que tienen a los ruidos es bastante crítica”, dijo la representante de esta ONG que agrupa a papás con hijos autistas.
Agregó: “Tanto en Navidad como Año Nuevo los ruidos de las bombardas, cohetecillos y otras más que son muy fuertes, nosotros tenemos que lidiar en casa con este momento que se hace eterno. Tenemos que sostener al niño para evitar que se pegue, agreda o se muerda”.
La ONG Autismo AQP trabaja con las familias de casi 250 padres con niños autistas, donde se comparte las experiencias y se informa con charlas o cursos de profesionales que están ligados a lo mismo.
“Quiero que la pases bonito, puedes trasmitir esta felicidad con mayor iluminación y menos ruidos para permitir que nuestros niños con autismo puedan disfrutar y sus familias también”, apuntó.
CAMPAÑA. Esta institución participó ayer de la campaña contra el uso de la pirotecnia denominada “En esta Navidad, más luces y menos ruido”, la misma que se inicia con la marcha de sensibilización.
